sábado, 26 de diciembre de 2009

Reflección

Les deseo Feliz año nuevo a todas las personas que de alguna u otra manera llegaron a leer esto, aunque no lo crean es muy importante para mi saber que alguien en el mundo lee lo que escribo. A aquellas personas que llegaron cuando les di la dirección, a otras que llegaron por obra del destino y a las que lo leyeron porque no tenían nada más que hacer.

A lo largo de este año todos lloramos, gritamos y sonreímos. Pero a pesar de todo esto maduramos cada uno a su modo y llegamos a ser mejores personas. Así como yo prometo ser mejor persona este 2010 y escribir mejor pues esa es mi leyenda personal. Cada uno de ustedes prometa algo y espero de todo corazón lo puedan cumplir. Aun nos quedan muchos años para ser mejores y sobre todo miles de obstáculos que superar... Nadie sabe cuándo vamos a morir, eso es lo bueno de esto. Por eso demos los mejor de nosotros cada día, quizás sea el ultimo.

martes, 22 de diciembre de 2009

Muerte.


Los ojos de el buscaron amor pero nunca lo encontró, los ojos de ella buscaron placer y se encontraba frente suyo. Dos puntos de vista distintos de la vida, placer y lujuria contra amor y lealtad. Y es que la vida fue escrita para todos, mientras unos buscan amor otros buscan diversión. Todo está escrito por una misma mano pero cada uno decide que hacer en esta gran obra teatral llamada "Universo".

Empuñando mi espada, la espada de la sabiduría empezó este viaje pasando por los parajes más recónditos del mundo, sangrando hasta más no poder, parando las hemorragias con las manos y rezando muy fuerte para poder salir de este problema y llegar al otro. Ahora estoy arrodillado ante una gran montaña con los ojos cerrados viendo como se acerca la espada que terminara mi vida de una vez.

Me levanto con la poca fuerza que me queda y veo a los ojos de mi ejecutor, le sonrió y corro hacia él. Levanta su espada llena de odio y lujuria para saciar su sed pero no logra alcanzarme, me enfrento empuñando mi espada de deseos y lo ataco con todas mis fuerzas aunque mi cuerpo este cansado de tantas batallas. Logra esquivar mis golpes y yo los de él, es una pelea a muerte.... Hasta que en un descuido atraviesa mi cuerpo con su espada, siento como me quita todo el aliento y caigo rendido a sus pies. El me mira y sonríe, con la poca fuerzas que me queda y sabiendo que es mi final agarro sus manos y atravesó mi cuerpo completamente hasta acercarme a él lo suficiente para clavarle la daga del amor en el cuello, le sonrió y le digo: Te amo.

Por fin vencí a mi enemigo aunque con el perdí la vida, en la eternidad sabré que vencí mi peor miedo y soy feliz.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Pasos perdidos.

Su cuerpo le pedía más, sus gritos desgarradores enloquecían a su madre, sus hermanos intentan tumbar la puerta pero no lo logran.

Los demonios que viven en él se liberan y poseen su cuerpo, lo hacen sangrar, lo hacen revolcarse en el piso. El pide piedad, pide paz por un momento. Pero su cuerpo no se controla y empieza a convulsionar. Ama estos fantasmas, ama vivir con ellos aunque lo maten, aunque lo golpeen el los ama pues son parte de él y nunca lo dejan de lado.

Los gritos de su madre pidiéndole que abra la puerta se alejan más, ella se pregunta donde quedo la inocencia de su hijo, donde están los ojos que conoció, donde esta aquel chico que era tan bueno. Ahora yace ante ella un demonio, gritando y amando a la oscuridad, esta oscuridad que lo lleno de vida y se la quito a la vez, esta oscuridad que nunca lo dejo solo, esta oscuridad que lo acompañara hasta la muerte...

En sus ojos negros se notaba el vació de su alma, la inocencia perdida, las lágrimas perdidas de su vida desesperada. Recorriendo el camino que él había elegido, viviendo con sus demonios y muriendo con ellos. Así vivía día y noche caminando por senderas oscuras, estirando las manos para no golpearse con nada pues ya no veía nada, con las rodillas sangrando después de tantas caídas, buscando el fin del camino aunque el sabia que cuando llegara a él daría media vuelta y regresaba pues se acostumbro a esta vida que no se puede llamar como tal.

Comprando esperanza a cambio de lágrimas, comprando alegría a cambio de sufrimiento. Así vive el, el escritor de la oscuridad, el amo y señor de las lágrimas, el Zahir!